"Imagen de un oso polar en estado critico a consecuencia del cambio climatico"
La temperatura media de la Tierra es ahora 1,1 °C más elevada que a finales del siglo XIX, antes de la revolución industrial, cuando la temperatura media era de -0,07 °C. Las consecuencias que podemos ver a simple vista son las sequías intensas, escasez de agua, incendios graves, aumento del nivel del mar,aumento o disminución de las precipitaciones, inundaciones, deshielo de los polos, tormentas catastróficas y disminución de la biodiversidad, cambio de circulación de los océanos y el aumento de las migraciones forzadas, también llamados “refugiados climáticos”.
A pesar de los riesgos, las políticas actuales apuntan a un aumento de temperatura de 2,8 °C para finales de siglo, superando los límites sugeridos para evitar los peores impactos climáticos. El aumento continuo de las emisiones de gases de efecto invernadero y la concentración histórica de CO2 indican la gravedad de la situación, con otros impactos como fenómenos meteorológicos extremos, olas de calor, mega incendios y sequías. En los peores escenarios, se proyecta un aumento de temperatura de hasta 4,8 ºC para finales de siglo, con consecuencias económicas, políticas, sociales y ambientales significativas.